¿Con qué frecuencia debes cambiarte el sostén?
1. Correas estiradas: Si los tirantes de su sostén están estirados y no brindan el soporte adecuado, es hora de considerar un sostén nuevo.
2. Aros rotos o deformados: Los sujetadores con aros deben tener aros firmes e intactos que brinden soporte sin atravesar la tela. Si los aros están rotos o deformados, puede afectar el ajuste y el soporte del sujetador.
3. Copas sueltas: Si las copas de su sostén están sueltas y no contienen completamente sus senos, es posible que no brinde el soporte adecuado.
4. Deshilachado o deshilachado: La formación de bolitas o el deshilachado de la tela pueden afectar la apariencia y durabilidad del sostén.
5. Tinción: Las manchas visibles o la decoloración del sujetador pueden indicar desgaste y afectar su higiene.
6. Pérdida de forma: Si su sostén ha perdido su forma con el tiempo y ya no brinda el mismo nivel de soporte, es hora de reemplazarlo.
7. Cambio de tamaño: Si su sostén se siente apretado o demasiado flojo en comparación con cuando lo compró por primera vez, puede deberse a que el tamaño de su cuerpo ha cambiado.
Siempre es una buena idea consultar las instrucciones de cuidado del fabricante para conocer recomendaciones específicas de lavado y cuidado de su sostén. El cuidado y almacenamiento adecuados, como lavarse las manos y evitar la secadora, pueden prolongar la vida útil de su sostén.
Además, es importante escuchar su propio criterio y reemplazar su sostén cuando ya no brinde el soporte y la comodidad adecuados.