El tiempo máximo que un dedo amputado puede permanecer viable para su reinserción suele ser de 6 a 12 horas, dependiendo de varios factores como la temperatura, el tipo de lesión y la salud general del individuo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cuanto antes se realice el procedimiento de reinserción, mayores serán las posibilidades de recuperación y funcionamiento exitosos del dedo.