Cómo manejar un ataque de asma sin un inhalador

El asma es una enfermedad respiratoria que ocurre cuando los bronquios en los pulmones reaccionan y comienzan a sufrir espasmos. Los sacos bronquiales y las vías respiratorias comienzan a llenarse de mucosidad y secreción, lo que dificulta la respiración. La piel que compone los pulmones comienza a hincharse lentamente y tiene dificultad para contraerse y expandirse cuando una persona respira. Los ataques pueden variar de leves a severos. Un ataque puede ser desencadenado por una variedad de factores ambientales como la caspa de los animales o el humo del cigarrillo, o puede ser desencadenado por una enfermedad respiratoria existente, como un resfriado.

Identifique el elemento que causó el ataque , si es posible. Quita el objeto o quítate de tener contacto para disminuir la gravedad del ataque.

Mantén la calma. Recuerda que el ataque terminará y conservará la energía. Concéntrese en las técnicas de respiración adecuadas.

Siéntese y relájese. Inhala y exhala lentamente usando los labios fruncidos. Inhale por la nariz y exhale por la boca, similar a soplar una vela.

Llame al 911 si ya no puede hablar o tiene una dificultad severa para caminar. Notifique a alguien que necesita ayuda agitando las manos o los brazos si no puede hablar. Muestre a la persona una tarjeta o brazalete de identificación médica, si está disponible.