¿Pueden las vitaminas ayudar a reducir los músculos rígidos en la parte inferior de la espalda y los glúteos?
La rigidez muscular afecta más comúnmente a los músculos de la espalda, las caderas y los hombros. Muchas opciones de estilo de vida llevan a la espalda y la rigidez de las nalgas, como el ejercicio, los trastornos del sueño y las deficiencias nutricionales. Las personas a menudo reducen la rigidez muscular al tomar uno o más suplementos. Los suplementos deben tomarse bajo la supervisión de su proveedor de atención médica.
Magnesio
Todos los órganos y sistemas del cuerpo utilizan magnesio. Ayuda a las enzimas, regula los minerales y contribuye a la producción de energía. Además, mientras que el calcio ayuda a los músculos a contraerse, el magnesio ayuda a los músculos a relajarse. La deficiencia de magnesio, a veces causada por la ingesta excesiva de café, refrescos y sal, puede provocar espasmos musculares, rigidez y debilidad. La cantidad recomendada de magnesio para adultos es entre 270 y 400 miligramos, dependiendo del tamaño y el sexo del individuo.
Potasio
El potasio es un mineral y electrolito que se utiliza en todo el cuerpo. Ayuda a la función de los músculos lisos, esqueléticos y cardíacos y ayuda a la conducción de la electricidad en el cuerpo. La deficiencia de potasio generalmente se debe a una pérdida excesiva a través de la orina o los intestinos. La ingesta recomendada de potasio para adultos es de 2.000 mg.
Vitamina D
La vitamina D es una vitamina soluble en grasa que ayuda al equilibrio del calcio, la inmunidad, la regulación de la presión arterial, la secreción de insulina y el crecimiento celular. La deficiencia de vitamina D causa debilidad muscular, dolor y rigidez. Además, los niveles bajos de vitamina D están relacionados con la deficiencia de calcio y la osteoporosis. La cantidad diaria recomendada de vitamina D para adultos es de 15 microgramos.
Ácidos grasos omega-3
Los ácidos grasos omega-3 son parte de una categoría de grasas poliinsaturadas que el cuerpo no puede fabricar pero debe obtener de la dieta. Los ácidos grasos omega-3 son importantes para el desarrollo, crecimiento y función del cerebro. La investigación indica que las grasas omega-3 también tienen propiedades antiinflamatorias. La ingesta recomendada de ácidos grasos omega-3 varía entre 1 y 4 gramos por día, según el historial médico y la ingesta alimentaria.