Cómo tratar los niveles altos de dióxido de carbono en la sangre
El dióxido de carbono (CO2) normalmente comprende aproximadamente 385 partes por millón (ppm) en la atmósfera. La presión parcial de CO2 en la sangre es normalmente de unos 40 mm de mercurio (mmHg). Un nivel alto de dióxido de carbono (hipercapnia) generalmente se define como una presión de CO2 de 45 mmHg y 75 mmHg se considera hipercapnia grave. Los casos leves de hipercapnia no suelen requerir un tratamiento específico que no sea respirar aire normalmente carbonatado, pero la hipercapnia grave puede requerir atención médica inmediata.
Identifique los síntomas de la hipercapnia. Los síntomas tempranos incluyen un pulso rápido, piel enrojecida, contracciones musculares y, a veces, un aumento de la presión arterial. La hipercapnia más grave puede causar arritmias cardíacas, respiración rápida y desorientación.
Brindar primeros auxilios para la hipercapnia. Retire a la víctima inmediatamente de la fuente de CO2 sin ponerse en peligro. La mayoría de las víctimas de hipercapnia que aún están conscientes deben recuperarse sin ningún tratamiento especial.
Solicite atención médica y realice una RCP si una víctima de hipercapnia está inconsciente. Realice un masaje cardíaco a una velocidad de una vez por segundo y la respiración artificial a una frecuencia de tres veces por segundo hasta que llegue la ayuda médica.
Administre oxígeno. El tratamiento médico primario para la hipercapnia es proporcionar oxígeno a través de una máscara. Este gas tiene una mayor concentración de oxígeno que la atmósfera y puede reducir el tiempo requerido para que la víctima se oxigene completamente.
Trate las complicaciones de una intoxicación grave por dióxido de carbono. Las complicaciones como la acidosis, la arritmia cardíaca y el edema pulmonar tienen tratamientos específicos. Puede tratar las convulsiones debidas al dióxido de carbono con dantroleno o diazepam junto con la ayuda respiratoria. Puede ser necesario un seguimiento extenso del tratamiento de apoyo para los pacientes con daño neurológico. El pronóstico para estos pacientes es muy variable y, por lo tanto, difícil de predecir.
Advertencias
La intoxicación grave por dióxido de carbono requiere atención médica inmediata. Puede provocar convulsiones, pérdida del conocimiento e incluso la muerte sin tratamiento médico.