Si bien no existe evidencia médica clara que sugiera que nadar después de perder el tapón mucoso sea dañino, algunos proveedores de atención médica pueden recomendar precaución debido al riesgo de infección. Además, nadar después de perder el tapón mucoso puede causar algunas molestias físicas. En última instancia, es mejor consultar con su médico o proveedor de atención médica para obtener orientación y recomendaciones personalizadas basadas en sus circunstancias específicas y la etapa de su embarazo.