¿Cómo se diagnostica el tumor de médula espinal?
1. Historial médico y síntomas :El médico comienza preguntando sobre el historial médico de la persona, incluidos síntomas como dolor de espalda, debilidad, cambios sensoriales o dificultad para caminar.
2. Examen físico y neurológico :Esto puede implicar verificar la debilidad muscular, los reflejos, la coordinación, el equilibrio y la función sensorial en las áreas afectadas.
3. Pruebas de imagen :La principal prueba de imagen utilizada para diagnosticar tumores de médula espinal es la resonancia magnética (MRI). La resonancia magnética proporciona imágenes detalladas de la médula espinal y puede identificar tumores, su ubicación y extensión.
4. Electromiografía (EMG) y estudios de conducción nerviosa :Estas pruebas pueden ayudar a evaluar la función nerviosa y muscular e identificar cualquier anomalía causada por el tumor.
5. Radiografías :A veces, se utilizan radiografías para evaluar los cambios óseos asociados con el tumor.
6. Biopsia :En algunos casos, se realiza una biopsia para obtener una muestra de tejido tumoral para su posterior análisis y confirmación del tipo de tumor. Esto puede implicar un procedimiento llamado biopsia estereotáctica, guiada por estudios de imágenes, para llegar con precisión al sitio del tumor.
7. Análisis de sangre :Se pueden realizar ciertos análisis de sangre para evaluar la salud general y descartar otras afecciones médicas.
8. Escaneo óseo :Se puede realizar una gammagrafía ósea para detectar cualquier anomalía en la estructura ósea relacionada con el tumor.
Una vez que se diagnostica un tumor de médula espinal, el médico puede ordenar pruebas adicionales para determinar las características del tumor y planificar el tratamiento adecuado.