¿Cómo se desarrolla el síndrome de Williams?
En la mayoría de los casos, el síndrome de Williams se hereda de uno de los padres que padece la afección. Sin embargo, en aproximadamente el 15% de los casos, ocurre como una nueva mutación, lo que significa que no se hereda de ninguno de los padres.
Si una persona con síndrome de Williams tiene hijos, existe un 50% de posibilidades de que cada hijo herede la afección. Sin embargo, incluso si un niño no hereda la enfermedad, aún puede ser portador, lo que significa que puede transmitirla a sus propios hijos.