¿Qué tienen en común la médula ósea y la dermis?

Tanto la médula ósea como la dermis están compuestas de tejido conectivo. El tejido conectivo es un tipo de tejido que conecta, sostiene y protege otros tejidos y órganos del cuerpo. Está formado por células, fibras y una sustancia fundamental. Las células del tejido conectivo incluyen fibroblastos, macrófagos y mastocitos. Las fibras del tejido conectivo incluyen colágeno, elastina y fibras reticulares. La sustancia fundamental es un material similar a un gel que llena los espacios entre las células y las fibras.

La médula ósea es un tipo especializado de tejido conectivo que se encuentra en las cavidades de los huesos. Es responsable de producir células sanguíneas. La dermis es una capa de tejido conectivo que se encuentra debajo de la epidermis (la capa más externa de la piel). Se encarga de brindar soporte y estructura a la piel.