¿Qué es un brazo fracturado?

Una fractura de brazo, también conocida como brazo roto, ocurre cuando uno o más de los huesos de la extremidad superior, específicamente el húmero (hueso de la parte superior del brazo), el cúbito o el radio (huesos del antebrazo), se rompe o se agrieta. Las fracturas de brazos pueden variar en gravedad, desde fracturas menores que pueden no causar un desplazamiento significativo de los fragmentos óseos hasta fracturas complejas que involucran múltiples fragmentos óseos y requieren intervención quirúrgica.

Los síntomas de un brazo fracturado pueden incluir:

- Dolor

- Hinchazón

- moretones

- Deformidad del brazo

- Dificultad para mover el brazo o la mano.

- Sensaciones de entumecimiento u hormigueo.

- Hueso visible que sobresale a través de la piel (fractura compuesta)

El tratamiento de una fractura de brazo depende del tipo y la gravedad de la fractura. Algunas fracturas se pueden tratar con inmovilización con un yeso o férula, mientras que otras pueden requerir reparación quirúrgica con placas, tornillos, clavos o alambres para mantener los fragmentos óseos en su lugar y promover una curación adecuada.

La evaluación y el tratamiento médicos adecuados son esenciales para garantizar una recuperación óptima y prevenir complicaciones a largo plazo. Si sospecha que tiene un brazo fracturado, busque atención médica inmediata de un profesional de la salud.