¿Qué haces por un sacro roto?

Una fractura de sacro, también conocida como fractura de sacro, es una lesión grave que requiere atención médica inmediata. A continuación se ofrece una descripción general de lo que normalmente se hace para tratar una fractura de sacro:

1. Evaluación inicial:

- La persona lesionada debe ser inmovilizada y transportada con cuidado a un hospital o centro de traumatología.

- Los profesionales médicos realizarán una evaluación exhaustiva, que incluirá un examen físico y pruebas de imágenes (como radiografías, tomografías computarizadas o resonancias magnéticas) para determinar el alcance y la gravedad de la fractura.

2. Manejo del dolor:

- Se pueden administrar analgésicos para controlar el dolor intenso y mejorar la comodidad.

3. Inmovilización:

- Dependiendo de la gravedad de la fractura, a la persona se le puede colocar un aparato ortopédico, yeso o tracción para inmovilizar el sacro y evitar lesiones mayores.

- También se puede recomendar reposo en cama para minimizar el movimiento y promover la curación.

4. Intervención quirúrgica:

- En algunos casos, puede ser necesaria una cirugía para estabilizar la fractura, realinear los huesos desplazados o eliminar fragmentos óseos.

- Las opciones quirúrgicas pueden incluir reducción abierta y fijación interna (RAFI), donde se utilizan tornillos, varillas o placas metálicas para mantener los huesos en su lugar, o técnicas mínimamente invasivas como la fijación sacra percutánea.

5. Rehabilitación:

- Una vez que la fractura haya sanado lo suficiente, se pueden recomendar fisioterapia y ejercicios de rehabilitación para restaurar la fuerza, la movilidad y la función de la zona lumbar y la región pélvica.

- Esto puede incluir ejercicios de fortalecimiento del núcleo, estiramientos y entrenamiento de la marcha.

6. Atención de seguimiento:

- Las visitas periódicas de seguimiento al médico son fundamentales para controlar el proceso de curación y garantizar una recuperación adecuada.

- Se pueden repetir las pruebas de imagen para evaluar la curación y progresión de la fractura.

Es importante recordar que el enfoque de tratamiento específico para una fractura de sacro puede variar según la condición del individuo y la gravedad de la lesión. Consulte a un profesional médico para obtener asesoramiento personalizado y recomendaciones de tratamiento.