Tuve gripe y ahora tengo una temperatura de 97 grados ¿qué pasa?

Es normal tener una temperatura corporal ligeramente elevada después de recuperarse de la gripe. Una temperatura de 97 grados no se considera lo suficientemente alta como para tener fiebre y, por lo general, no es motivo de preocupación. Sin embargo, si experimenta algún otro síntoma, como tos, dolor de garganta o dificultad para respirar, es importante consultar a un médico para descartar cualquier otra afección médica subyacente.