¿Qué pasa si tienes demasiada bilis?
- Reflujo ácido: La bilis puede irritar el revestimiento del esófago y provocar reflujo ácido y acidez de estómago.
- Náuseas y vómitos: La bilis puede provocar náuseas y vómitos, especialmente después de comer alimentos grasos o picantes.
- Diarrea: La bilis puede causar diarrea al aumentar la cantidad de agua en las heces.
- Dolor abdominal: La bilis puede causar dolor abdominal, especialmente en el cuadrante superior derecho del abdomen.
- Pérdida de peso: La bilis puede provocar pérdida de peso al interferir con la absorción de nutrientes de los alimentos.
- Ictericia: La bilis puede causar ictericia, coloración amarillenta de la piel y los ojos, si se acumula en el torrente sanguíneo.
- Daño hepático: Demasiada bilis puede dañar el hígado y provocar insuficiencia hepática.
En algunos casos, demasiada bilis puede ser un signo de una afección médica subyacente grave, como:
- Cálculos biliares: Los cálculos biliares son depósitos duros que pueden formarse en la vesícula biliar y bloquear el flujo de bilis.
- Colecistitis: La colecistitis es una inflamación de la vesícula biliar, que puede ser causada por cálculos biliares.
- Pancreatitis: La pancreatitis es una inflamación del páncreas, que puede ser causada por cálculos biliares.
- Enfermedad hepática: La enfermedad hepática puede hacer que la bilis se acumule en el torrente sanguíneo, lo que provoca ictericia y otros síntomas.
- Cáncer: El cáncer de hígado, páncreas o conductos biliares también puede causar demasiada bilis.
Si experimenta alguno de los síntomas de demasiada bilis, es importante que consulte a su médico para recibir diagnóstico y tratamiento.