El hígado de la rana produce bilis, que se almacena en la vesícula biliar. La vesícula biliar está conectada al duodeno por el conducto biliar. Cuando la rana ingiere alimento, la vesícula biliar se contrae y libera bilis en el duodeno. La bilis ayuda a descomponer las grasas de los alimentos para que puedan ser absorbidas por el intestino delgado de la rana.