Lo que hay que saber sobre la actual ola de COVID de verano
1. Mayor transmisibilidad: La ola actual está impulsada principalmente por las subvariantes Omicron altamente transmisibles, BA.4 y BA.5, que son más contagiosas que las variantes anteriores. Estas subvariantes han provocado un aumento de casos en muchos países.
2. Medidas relajadas: Muchos países han relajado las restricciones y protocolos de COVID-19, como los mandatos de uso de mascarillas y las reglas de distanciamiento social, lo que ha facilitado la propagación del virus.
3. Brecha de inmunidad: Si bien las campañas de vacunación han avanzado, todavía existen lagunas en la inmunidad, especialmente entre las poblaciones vulnerables. Esto, combinado con la disminución de la inmunidad con el tiempo, contribuye al aumento de casos.
4. Viajes y reuniones: El verano es una época de aumento de viajes y reuniones sociales, incluidos festivales y eventos, que pueden contribuir a la propagación del virus, especialmente en entornos cerrados o abarrotados.
5. Riesgo para personas no vacunadas: Las personas no vacunadas siguen teniendo un mayor riesgo de enfermedad grave, hospitalización y muerte por COVID-19, lo que enfatiza la importancia de la vacunación y las dosis de refuerzo.
6. Importancia de la vacunación: La vacunación y los refuerzos siguen siendo la forma más eficaz de protegerse a sí mismo y a los demás de enfermedades graves y la muerte a causa del COVID-19. Se recomienda la vacunación para todas las personas elegibles, incluidos los niños.
7. Poblaciones vulnerables: Los adultos mayores, las personas con afecciones médicas subyacentes y las personas inmunodeprimidas tienen un mayor riesgo de sufrir resultados graves. Es fundamental que estas poblaciones tomen precauciones, como evitar lugares concurridos y usar máscaras.
8. Síntomas: Los síntomas de la ola actual son generalmente similares a los de variantes anteriores, incluyendo fiebre, tos, dolor de garganta, fatiga y pérdida del gusto o del olfato. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar síntomas diferentes o más leves.
9. Pruebas: Se recomiendan pruebas periódicas para quienes experimentan síntomas o han estado expuestos a alguien con COVID-19. Las pruebas rápidas de antígenos y las pruebas de PCR pueden ayudar a identificar infecciones.
10. Prevención: Mantener medidas preventivas, como la higiene de manos, el uso de mascarillas en lugares cerrados o concurridos, el distanciamiento físico cuando sea posible y evitar el contacto cercano con personas enfermas, puede ayudar a reducir el riesgo de infección.
Es importante mantenerse informado sobre las orientaciones brindadas por las agencias de salud pública y los expertos médicos, y tomar las precauciones adecuadas para protegerse a sí mismo y a los demás durante esta ola de COVID de verano.