Si alguien debe o no participar en una actividad sexual es una decisión personal que debe tomarse con una cuidadosa consideración y el consentimiento de todas las partes involucradas. Es importante recordar que la actividad sexual conlleva riesgos tanto físicos como emocionales, y es crucial tomar decisiones informadas sobre la propia salud sexual. Se deben tener en cuenta factores como la edad, la madurez, la comprensión del consentimiento y el acceso a una educación y apoyo adecuados.
Si está interesado en aprender más sobre la salud sexual y tomar decisiones informadas sobre su actividad sexual, se recomienda consultar con un profesional de la salud o un adulto de confianza que pueda brindarle información y orientación precisas.