¿Por qué a tu hijo le sangra la nariz cuando tiene temperatura alta?
1. Sequedad e irritación:Una temperatura alta puede provocar deshidratación y sequedad de la mucosa nasal (el revestimiento de la nariz). Esta sequedad puede hacer que los vasos sanguíneos de la nariz sean más propensos a romperse y sangrar.
2. Aumento del flujo sanguíneo:una temperatura alta puede provocar un aumento del flujo sanguíneo y vasodilatación (ensanchamiento de los vasos sanguíneos) en todo el cuerpo, incluida la zona nasal. Este aumento del flujo sanguíneo puede ejercer presión adicional sobre los delicados vasos sanguíneos de la nariz, haciéndolos más propensos a estallar y causar sangrado.
3. Infección:Algunas infecciones que causan temperatura alta, como el resfriado común, la influenza o la sinusitis, pueden causar inflamación e hinchazón de las fosas nasales. Esta inflamación puede dañar los vasos sanguíneos de la nariz y aumentar la probabilidad de que sangren.
4. Medicamentos:Ciertos medicamentos, como anticoagulantes o descongestionantes nasales, pueden aumentar el riesgo de hemorragia nasal, especialmente en combinación con temperatura alta. Los anticoagulantes interfieren con la capacidad del cuerpo para formar coágulos sanguíneos, mientras que los descongestionantes nasales pueden causar sequedad e irritación de los tejidos nasales.
5. Condiciones subyacentes:en algunos casos, el sangrado nasal acompañado de temperatura alta puede ser un signo de una afección médica subyacente, como un trastorno de la coagulación sanguínea o una afección respiratoria. Si el sangrado nasal es intenso o persistente, o si ocurre junto con otros síntomas preocupantes, es importante consultar a un profesional de la salud para una evaluación.
Si su hijo experimenta sangrado nasal durante una temperatura alta, es importante mantener la calma y ayudarlo a controlar el sangrado. Esto puede implicar sonarse la nariz suavemente para eliminar los coágulos, aplicar presión en la parte blanda de la nariz durante unos minutos y mantener la cabeza elevada. Si el sangrado persiste o es abundante, busque atención médica.