¿Cuáles son los síntomas de tener que extirpar las amígdalas?
- Amigdalitis frecuente:Episodios recurrentes de amigdalitis, especialmente si interfieren con sus actividades diarias o requieren tratamientos antibióticos repetidos.
- Amigdalitis crónica:Hinchazón e inflamación persistente de las amígdalas durante un período prolongado, lo que provoca dificultad para tragar, respirar o malestar crónico.
- Apnea obstructiva del sueño:el agrandamiento de las amígdalas puede obstruir las vías respiratorias durante el sueño, provocando pausas en la respiración (apnea) y alteraciones de los patrones de sueño. Esto puede provocar somnolencia diurna excesiva y fatiga.
- Hipertrofia de amígdalas:Amígdalas significativamente agrandadas que provocan dificultad para tragar o respirar, especialmente en niños.
- Absceso amigdalino recurrente:formación de bolsas llenas de pus dentro de las amígdalas, que provocan dolor intenso y dificultad para tragar.
- Piedras en las amígdalas:Depósitos endurecidos de bacterias y desechos que se forman en las criptas de las amígdalas y pueden causar malestar, mal aliento (halitosis) o sensación de cuerpo extraño en la garganta.