¿Cuáles son los síntomas de la esclerodermia localizada?

Los síntomas de la esclerodermia localizada pueden variar según el tipo y la gravedad de la afección. Algunos síntomas comunes incluyen:

- Cambios en la piel:esto puede incluir piel engrosada, endurecida o tirante. La piel también puede decolorarse, con manchas blancas, rojas o marrones.

- Tirantez de la piel:La piel puede volverse tan tirante que restringe el movimiento y provoca molestias.

- Picazón:La piel afectada puede presentar picazón, especialmente en las primeras etapas de la afección.

- Dolor:En algunos casos, la esclerodermia localizada puede provocar dolor en las zonas afectadas.

- Dolor en las articulaciones:la esclerodermia localizada en ocasiones puede afectar las articulaciones, provocando dolor, hinchazón y rigidez.

- Debilidad muscular:la esclerodermia localizada también puede provocar debilidad muscular en las zonas afectadas.

- Fenómeno de Raynaud:Esta es una condición que afecta el flujo sanguíneo a los dedos de manos y pies, provocando que se tornen blancos, azules o rojos.

- Problemas gastrointestinales:En algunos casos, la esclerodermia localizada puede afectar el tracto gastrointestinal, provocando problemas como acidez de estómago, hinchazón y diarrea.

- Problemas pulmonares:en casos raros, la esclerodermia localizada puede afectar los pulmones, provocando dificultad para respirar y tos.