¿Cuáles son los síntomas de una fuga de líquido cefalorraquídeo?
• Dolor de cabeza que empeora al estar de pie o sentado y mejora al acostarse
• Rigidez o dolor en el cuello o la espalda.
• Náuseas o vómitos
• Aturdimiento o mareos
• Sensación de pulsación o presión en la cabeza.
• Dificultad para concentrarse o pensar
• Pérdida de audición
• Alteraciones visuales
• Entumecimiento o parálisis facial
• Debilidad o parálisis en las extremidades.