Cómo el alcohol y el tabaquismo afectan la artritis reumatoide

El alcohol ingresa al cuerpo a través de la boca y baja por el esófago hasta el estómago. En el estómago, el alcohol se absorbe en el torrente sanguíneo a través de las paredes del estómago y del intestino delgado. La tasa de absorción se ve afectada por varios factores, incluida la concentración de alcohol en la bebida, la cantidad de comida en el estómago y la edad, el peso y el sexo de la persona.

Una vez en el torrente sanguíneo, el alcohol viaja al hígado, donde se descompone en acetaldehído. El acetaldehído es una sustancia tóxica que puede dañar las células y los tejidos del cuerpo. El hígado también produce enzimas que ayudan a descomponer el acetaldehído en compuestos inofensivos que pueden excretarse del cuerpo a través de la orina, el aliento y el sudor.

Los efectos del alcohol en el organismo dependen de la cantidad de alcohol consumido y de la tolerancia individual de la persona. El alcohol puede afectar el juicio, la coordinación y el tiempo de reacción. También puede provocar náuseas, vómitos, dolores de cabeza y diarrea. En grandes cantidades, el alcohol puede provocar intoxicación por alcohol, que puede ser mortal.

El abuso de alcohol a largo plazo puede provocar una serie de problemas de salud, como daño hepático, enfermedades cardíacas, cáncer y trastornos neurológicos. El abuso de alcohol también puede causar problemas en las relaciones, el trabajo y las finanzas.

Si le preocupa su consumo de alcohol, hable con su médico. Hay muchos recursos disponibles para ayudar a las personas que luchan contra el abuso de alcohol.