¿Dormir puede ayudar a tu sistema circulatorio?
Mejor regulación de la presión arterial :Dormir ayuda a bajar la presión arterial, reduciendo el riesgo de desarrollar hipertensión. Cuando tienes falta de sueño, tu cuerpo libera más hormonas del estrés, como el cortisol, lo que puede provocar un aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
Reducción de la inflamación :El sueño tiene efectos antiinflamatorios que pueden beneficiar al sistema circulatorio. La inflamación crónica es un factor de riesgo de varias enfermedades cardiovasculares y el sueño ayuda a reducir los niveles de marcadores inflamatorios en el cuerpo.
Mejora de la sensibilidad a la insulina :El sueño juega un papel crucial en la regulación de los niveles de azúcar en sangre y en el mantenimiento de la sensibilidad a la insulina. La falta de sueño puede provocar resistencia a la insulina, lo que aumenta el riesgo de diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.
Regulación de la coagulación sanguínea :El sueño ayuda a mantener un equilibrio saludable entre la coagulación sanguínea y la anticoagulación, reduciendo el riesgo de coágulos sanguíneos y eventos cardiovasculares relacionados.
Función endotelial mejorada :El sueño favorece el funcionamiento adecuado del endotelio, el revestimiento interno de los vasos sanguíneos. La disfunción endotelial contribuye al desarrollo de enfermedades cardiovasculares y el sueño ayuda a preservar la salud y la integridad del sistema vascular.
Además de estos efectos directos sobre el sistema circulatorio, el sueño también beneficia indirectamente al sistema cardiovascular al promover el bienestar físico y mental general. Por ejemplo, dormir ayuda a mantener un peso saludable, reduce el estrés y mejora el estado de ánimo, todo lo cual puede impactar positivamente en la salud cardiovascular.