Gary sufre de atrofia muscular continua incluso después de someterse a fisioterapia porque las neuronas motoras cortadas que inervan su cuádriceps ya no pueden transmitir señales desde el sistema nervioso central a los músculos. Sin estas señales neuronales, los músculos cuádriceps no reciben el estímulo necesario para su crecimiento y mantenimiento, lo que provoca atrofia muscular. La fisioterapia por sí sola no puede regenerar las neuronas motoras dañadas ni restablecer las conexiones funcionales entre los nervios y los músculos. En tales casos, se podrían considerar enfoques alternativos, como la reparación quirúrgica de los nervios o dispositivos de asistencia, para abordar el daño nervioso subyacente y ayudar a mitigar una mayor atrofia muscular.