Es poco probable que tirar de la cola de un pug por accidente la rompa, ya que sus colas son bastante flexibles. Sin embargo, podría causar hematomas o daño muscular. En la mayoría de los casos, los hematomas menores o los daños musculares en la cola de un pug sanarán por sí solos en unos pocos días a una semana. Si la lesión es más grave, como una fractura o dislocación, puede requerir atención veterinaria y tardar más en sanar. Si sospecha que la cola de su pug puede estar lesionada, siempre es una buena idea consultar a un veterinario para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.