No, la carne que comemos todos los días, como el filete o la pechuga de pollo, no es tejido de músculo liso ni de músculo esquelético. Los músculos lisos se encuentran en los órganos internos y los vasos sanguíneos, mientras que los músculos esqueléticos están adheridos a los huesos y son responsables de los movimientos voluntarios. La carne que comemos es tejido de músculo esquelético, también conocido como tejido de músculo estriado, que está formado por células largas y cilíndricas con estrías visibles o patrones de bandas.