¿Cómo ha afectado el COVID-19 a las poblaciones tribales?
* Disparidades socioeconómicas: Los AIAN tienen más probabilidades de vivir en la pobreza y tener ingresos más bajos que la población general. Esto significa que es menos probable que tengan acceso a vivienda adecuada, atención médica y otros recursos que puedan ayudar a protegerlos del virus.
* Disparidades en salud: Los AIAN también tienen tasas más altas de enfermedades crónicas como diabetes, obesidad y enfermedades cardíacas, que pueden aumentar el riesgo de enfermedad grave y muerte por COVID-19.
* Falta de acceso a la atención sanitaria: Los AIAN suelen vivir en zonas rurales alejadas de los centros de atención sanitaria. Esto puede dificultarles la obtención de la atención que necesitan, incluso cuando están enfermos de COVID-19.
* Barreras culturales y lingüísticas: Los AIAN también pueden enfrentar barreras culturales y lingüísticas que les dificultan comprender y acceder a información sobre COVID-19.
El impacto de la COVID-19 en las poblaciones tribales ha sido devastador. Además de la pérdida de vidas, el virus también ha causado trastornos económicos generalizados, aumento de la pobreza y exacerbado las desigualdades existentes. Es fundamental que el gobierno y otras organizaciones tomen medidas para abordar las necesidades de las poblaciones tribales y garantizar que tengan acceso a los recursos que necesitan para recuperarse de la pandemia.
A continuación se muestran algunas formas específicas en las que el COVID-19 ha impactado a las poblaciones tribales:
* Mayor riesgo de infección y muerte: Los AIAN tienen más del doble de probabilidades de infectarse con COVID-19 y tres veces más de morir a causa del virus que la población general.
* Disparidades en la atención sanitaria: Los AIAN tienen menos probabilidades de tener seguro médico y más probabilidades de tener condiciones de salud crónicas que pueden aumentar el riesgo de enfermedad grave y muerte por COVID-19.
* Falta de acceso a la atención sanitaria: Es más probable que los AIAN vivan en zonas rurales alejadas de los centros de atención sanitaria. Esto puede dificultarles la obtención de la atención que necesitan, incluso cuando están enfermos de COVID-19.
* Disrupción económica: La pandemia ha causado perturbaciones económicas generalizadas en las comunidades tribales, lo que ha provocado pérdidas de empleos, cierres de empresas y un aumento de la pobreza.
* Aumento del aislamiento social: Muchos AIAN viven en comunidades muy unidas y la pandemia les ha dificultado reunirse y socializar. Esto puede provocar aislamiento social y soledad, lo que puede tener efectos negativos en la salud mental.
El impacto de la COVID-19 en las poblaciones tribales es una grave crisis de salud pública. Es fundamental que el gobierno y otras organizaciones tomen medidas para abordar las necesidades de estas comunidades y garantizar que tengan acceso a los recursos que necesitan para recuperarse de la pandemia.