¿Quién está en riesgo por los cigarrillos electrónicos?
- Juventud: Los cigarrillos electrónicos son especialmente perjudiciales para los jóvenes, cuyo cerebro aún está en desarrollo. La nicotina puede afectar el desarrollo del cerebro y provocar problemas duraderos de atención, aprendizaje y memoria. Los cigarrillos electrónicos también contienen otras sustancias químicas nocivas, como formaldehído y acroleína, que pueden dañar los pulmones y aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares y cáncer.
- Mujeres embarazadas: La nicotina puede atravesar la placenta y dañar al feto en desarrollo. Puede aumentar el riesgo de parto prematuro, bajo peso al nacer y síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL).
- Adultos con determinadas condiciones de salud: Los cigarrillos electrónicos pueden empeorar condiciones de salud subyacentes, como enfermedades cardíacas, pulmonares y diabetes. La nicotina también puede aumentar la presión arterial y los niveles de colesterol, así como el riesgo de sufrir un derrame cerebral y un ataque cardíaco.
- Personas que están intentando dejar de fumar: Los cigarrillos electrónicos pueden hacer que sea más difícil dejar de fumar, ya que aún contienen nicotina y pueden reforzar el hábito de fumar.
En general, cualquier persona que no sea actualmente adicta a la nicotina debe evitar los cigarrillos electrónicos. Si usted es fumador actual, la mejor manera de proteger su salud es dejar de fumar por completo. Los cigarrillos electrónicos no son una alternativa segura ni eficaz a los cigarrillos tradicionales.