¿Por qué los médicos le dicen que no fume después de la medianoche cuando le extirpan la vesícula biliar?
- Deterioro de la cicatrización de heridas: Fumar puede interferir con la capacidad del cuerpo para curarse adecuadamente. Contrae los vasos sanguíneos, lo que reduce el flujo de oxígeno y nutrientes al sitio quirúrgico, lo que puede retrasar la cicatrización de la herida y aumentar el riesgo de infección.
- Aumento de la inflamación: Fumar provoca inflamación crónica en todo el cuerpo, lo que puede empeorar la inflamación y el dolor posoperatorio.
- Complicaciones pulmonares: Fumar puede aumentar el riesgo de complicaciones respiratorias, como neumonía y bronquitis, después de una cirugía debido a la irritación y daño que causa en los pulmones.
- Riesgos de la anestesia: Fumar puede interactuar con la anestesia y aumentar el riesgo de complicaciones durante la cirugía.
- Mala oxigenación: Fumar reduce la capacidad de la sangre para transportar oxígeno, lo que puede comprometer la capacidad del cuerpo para recuperarse después de una cirugía.
Por lo tanto, los médicos suelen recomendar a los pacientes que dejen de fumar mucho antes de la cirugía de extirpación de la vesícula biliar para optimizar el proceso de curación y minimizar el riesgo de complicaciones.