¿Se siente raro después de una resonancia magnética?

Después de una resonancia magnética, algunas personas pueden experimentar una variedad de sensaciones o efectos secundarios, mientras que otras pueden no sentir ningún cambio notable. A continuación se detallan algunas experiencias comunes que puede encontrar después de una resonancia magnética:

Dolor de cabeza:algunas personas informan haber experimentado un leve dolor de cabeza después de la exploración. Esto suele estar relacionado con el material de contraste (gadolinio) que se utiliza durante una resonancia magnética para mejorar la visibilidad de ciertas estructuras del cuerpo. Sin embargo, estos dolores de cabeza suelen ser transitorios y desaparecen en unas pocas horas o días.

Náuseas o mareos:en algunos casos, las personas pueden sentir náuseas o mareos durante o poco después de la exploración. El ambiente cerrado y ruidoso de la máquina de resonancia magnética y el material de contraste podrían contribuir a estas sensaciones. Descansar y mantenerse hidratado después de la exploración puede ayudar a aliviar cualquier malestar.

Sensaciones de calor o frío:es posible que experimente breves sensaciones de calor o frío en la parte del cuerpo que se escanea. Por lo general, esto está relacionado con los pulsos de radiofrecuencia emitidos por la máquina de resonancia magnética y se considera una respuesta normal a los campos magnéticos.

Sabor metálico:algunas personas informan un sabor metálico o amargo en la boca durante la exploración. Esto es inofensivo y temporal, causado por la interacción entre los campos magnéticos y los empastes u objetos metálicos en la boca.

Ansiedad:la naturaleza cerrada de la máquina de resonancia magnética puede provocar sentimientos de ansiedad o claustrofobia en determinadas personas. Si es propenso a la ansiedad, informarle al técnico de resonancia magnética de antemano puede ayudarlo a tomar medidas para que la experiencia sea más cómoda para usted.

Dolor muscular:los fuertes campos magnéticos generados por la máquina de resonancia magnética pueden hacer que los músculos se contraigan ligeramente. Esto puede provocar dolor o rigidez muscular leve, especialmente si tuvo que mantener una posición específica durante la exploración.

En la mayoría de los casos, estas sensaciones y efectos secundarios son transitorios y deberían desaparecer en poco tiempo. Si experimenta algún síntoma preocupante o persistente después de una resonancia magnética, es importante consultar a su proveedor médico para una evaluación adicional.