Efectos secundarios de las pastillas de zinc

El zinc es un mineral que ayuda a respaldar el sistema inmunológico de su cuerpo a la vez que ayuda en la división celular y la síntesis de proteínas y ADN, explica la Oficina de Suplementos Dietéticos. Si desarrolla síntomas de resfriado, como congestión nasal o irritación de la garganta, es posible que el tratamiento con pastillas de zinc reduzca su malestar. Estas pastillas administradas por vía oral están disponibles sin receta y solo deben usarse según las indicaciones. Hable con su médico si tiene preguntas acerca de los efectos secundarios de las pastillas de zinc.

Malestar estomacal

Tras el tratamiento con las pastillas de zinc pueden surgir trastornos estomacales, informa el Instituto Linus Pauling de la Universidad Estatal de Oregón. Puede desarrollar acidez estomacal, náuseas o comenzar a vomitar. Estos efectos secundarios también pueden contribuir a una pérdida temporal del apetito. Si desarrolla efectos secundarios graves o persistentes relacionados con el estómago, consulte a su médico.

Diarrea

La irritación del tracto digestivo causada por las pastillas de zinc puede provocar diarrea, informa el Centro de Cáncer Memorial Sloan-Kettering. Si desarrolla diarrea, experimentará movimientos intestinales frecuentes y acuosos. También puede desarrollar distensión abdominal o calambres junto con diarrea. La diarrea crónica puede aumentar su riesgo de deshidratación debido a la pérdida excesiva de líquidos. Busque atención de su médico si la diarrea persiste durante más de unos pocos días.

Irritación oral

Las pastillas de zinc pueden irritar el interior de la boca, advierte el Instituto Linus Pauling. Puede desarrollar parches dolorosos en la lengua o molestias en la garganta. Estos efectos secundarios orales de las pastillas de zinc son temporales y disminuyen una vez que finaliza el tratamiento. Las pastillas de zinc solo deben usarse según las indicaciones para limitar la gravedad de los efectos secundarios orales.