Medicamentos antifúngicos para la sinusitis
La infección de los senos por hongos, o sinusitis por hongos, puede ocurrir en varias formas. De lo contrario, las personas sanas pueden tener un crecimiento excesivo de hongos, caracterizados por dolor sinusal, presión y congestión nasal. Otras personas experimentan una reacción inflamatoria alérgica, caracterizada por una congestión nasal marcada. Finalmente, la sinusitis fúngica invasiva es una condición grave que comúnmente ocurre en individuos inmunocomprometidos. Los antifúngicos son los fármacos de elección para tratar la sinusitis fúngica.
Anfotericina B
La amfotericina B es un medicamento antifúngico que se une a la membrana de la célula fúngica, lo que provoca la filtración de la membrana y la muerte celular. La anfotericina B se administra comúnmente por vía intravenosa para tratar la sinusitis micótica invasiva grave en individuos con inmunidad reducida. Un artículo publicado en la edición de abril de 2001 del "Journal of Medical Association of Thailand" afirma que el tratamiento con anfotericina B complementa eficazmente la cirugía, que es el pilar del tratamiento, especialmente en individuos inmunocomprometidos.
Los efectos secundarios comunes incluyen fiebre , escalofríos, respiración rápida y dolor de cabeza. MedlinePlus advierte que la anfotericina B puede causar efectos secundarios graves y, por lo tanto, debe usarse solo para el tratamiento de infecciones fúngicas potencialmente fatales.
Voriconazol
El voriconazol pertenece a una clase de antifúngicos conocidos como triazoles y se usa para tratar Sinusitis fúngica causada por especies de Aspergilla y Candida. El voriconazol actúa retardando el crecimiento de los hongos y puede administrarse por vía oral o intravenosa, dependiendo de la condición del paciente. Los efectos secundarios del voriconazol son leves en comparación con la anfotericina B e incluyen diarrea, vómitos, mareos y cambios en la visión. De hecho, según el estudio de caso publicado en la edición de enero de 2008 de "Ear Nose Throat Journal", un paciente con sinisitis severa por Aspergillus que no estaba dispuesto a someterse a una cirugía y cuya condición era demasiado débil para el tratamiento con anfotericina B se trató de manera efectiva con voriconazol en combinación con otro medicamento antifúngico conocido como caspofungina.
Itraconazol
El itraconazol también pertenece a la clase de los triazoles y tiene un mecanismo de acción similar al del voriconazol. Se usa comúnmente para tratar infecciones fúngicas del tracto respiratorio y generalmente está disponible en forma de tableta o suspensión. El medicamento debe tomarse con el estómago lleno durante aproximadamente 2 a 8 semanas, según lo prescrito por un médico. De acuerdo con un artículo de mayo-junio de 2009 en el "American Journal of Rhinology and Allergy", el itraconazol oral puede ayudar a los pacientes con sinusitis fúngica con terapia y cirugía fallidas y puede prevenir las recurrencias frecuentes.
Los efectos secundarios comunes del itraconazol incluyen el malestar Estómago, cefalea, mareos y dolores musculares. El itraconazol puede causar insuficiencia cardíaca congestiva y, por lo tanto, es importante informar al médico sobre cualquier antecedente de enfermedad cardíaca.