Dietas Altas en Proteínas e Insulina
La American Heart Association no recomienda dietas altas en proteínas. Las dietas altas en proteínas, como las dietas Atkins, Protein Power y Stillman, restringen en gran medida los nutrientes esenciales que su cuerpo necesita al concentrarse en la ingesta de proteínas. La proteína dietética alta tiene efectos dañinos en el metabolismo de la glucosa al promover la resistencia a la insulina. La resistencia a la insulina afecta la capacidad del cuerpo para responder y utilizar la insulina que produce. Esta incapacidad conduce a anomalías en la glucosa en la sangre.
Insulina
La insulina es una hormona responsable de disminuir la glucosa en la sangre. Cuando los niveles de glucosa aumentan en la sangre, la insulina estimula la absorción del exceso de glucosa por parte del hígado y las células musculares. Las células utilizan la glucosa almacenada como suministro de energía. Los cambios en la dieta en la proporción de carbohidratos a proteínas producen cambios en la regulación de la glucosa, como lo demuestran Donald K. Layman y sus colegas, publicados en "Nutrición humana y metabolismo" 2003. Por lo tanto, las dietas ricas en proteínas influyen en los niveles de insulina en el cuerpo.
Tipos de proteínas dietéticas
Existen tres tipos de proteínas dietéticas en las dietas humanas: proteína de carne, proteína láctea y proteína vegetal. No todos los tipos de proteínas afectan a la insulina de la misma manera. Los estudios sobre el aumento de la leche en la dieta o el aumento de la proteína animal en la dieta han demostrado una mayor incidencia de resistencia a la insulina en los niños. Otros tipos de proteínas, como la soya o el pescado magro, disminuyen la respuesta de la insulina. El colesterol mejorado es un beneficio agregado de la proteína de pescado magra. Las variaciones en las fuentes de proteínas, en lugar de cantidades de proteínas, representan una opción dietética más segura.
Proteínas requeridas
La cantidad diaria recomendada, o RDA, de proteínas en los Estados Unidos es de 0.8 g de proteína por kilogramo de Peso corporal en adultos. Se recomienda que los niños ingieran solo de 9 a 20 g por día, mientras que los adultos necesitan de 34 a 46 g por día. La dosis diaria recomendada recomendada para mujeres embarazadas y en período de lactancia aumenta a 71 g por día. Según el peso corporal, los niños necesitan más proteínas por kilogramo porque están construyendo nuevos tejidos corporales. Una dieta estadounidense típica proporciona más que la RDA.
La diabetes se produce cuando hay demasiada glucosa en la sangre y no se produce suficiente insulina para eliminarla o el cuerpo no puede usarla La insulina que se produce. Las dietas altas en proteínas prolongadas aumentan los aminoácidos presentes en la sangre, que afectan el equilibrio de la glucosa. Las dietas altas en proteínas a largo plazo en individuos sanos inducen una alta secreción de insulina estimulada por la glucosa y una producción de glucosa no suprimida por el hígado. En los diabéticos, demasiada proteína disminuye la sensibilidad a la insulina y provoca un aumento de la insulina producida por el hígado también. Ambos ejemplos indican respuestas problemáticas a las dietas altas en proteínas.
Consideraciones
Muchas dietas altas en proteínas incluyen altas cantidades de grasas saturadas de proteínas animales. Tales grasas elevan el colesterol de lipoproteínas de baja densidad, o LDL, que es el colesterol "malo". Los niveles altos de colesterol LDL se asocian con un mayor riesgo de enfermedad cardíaca. Además, las proteínas animales de alta alimentación causan un aumento de la producción urinaria, que elimina los minerales esenciales del cuerpo, como el calcio. El cuerpo pierde un promedio de 1.75 mg de calcio por cada 1 g de proteína animal ingerida, y los depósitos de calcio retenidos en los riñones producen cálculos renales dolorosos.