¿Cuáles son las causas de los depósitos de calcio en los pulmones?

Su médico cree que puede tener un depósito de calcio (o calcificación) sobre o dentro de su pulmón. También puede usar el término "calcificación pulmonar". Si bien los depósitos de calcio en el pulmón son generalmente benignos (no cancerosos), pueden volverse malignos. Los depósitos de calcio deben controlarse para prevenir el cáncer y porque muchas de las afecciones que causan la calcificación también son graves.

¿Qué son los depósitos de calcio?

Los depósitos de calcio son pequeñas acumulaciones de calcio, que pueden acumularse en cualquier lugar tu cuerpo. Éstos crean espolones óseos, cálculos renales y biliares, y, en el hombro, tendinitis. Muchos depósitos de calcio no requieren tratamiento médico (incluso pueden reabsorberse directamente en su cuerpo). Sin embargo, en los pulmones, pueden ser una señal de que usted tiene una condición subyacente grave que los está formando.

Síntomas de depósitos de calcio en los pulmones

Los síntomas incluyen una mayor dificultad para respirar (especialmente después de lo que pudo haber parecido un resfriado normal), respiración más rápida de lo normal (taquipnea), sibilancias, una tos que suena "apretada" y seca, pérdida de apetito y cianosis (un color azulado evidente en la piel o los labios de la cara).

Diagnóstico de un depósito de calcio

La mayoría de los depósitos de calcio en los pulmones se descubren por accidente (a menudo durante una radiografía de tórax realizada por otros motivos). Una tomografía computarizada es mejor para detectar depósitos que una resonancia magnética. Es posible que también necesite una variedad de pruebas de imagen, que pueden incluir radiografía de tórax, tomografías computarizadas y escintigrafía ósea. También se puede necesitar una biopsia.

¿Qué causa los depósitos de calcio?

Muchas cosas pueden contribuir a que se forme un depósito de calcio en los pulmones. Infecciones (bronquitis crónica y neumonía), tuberculosis, lesiones pulmonares previas, histoplasmosis (una infección por hongos), exposición prolongada al asbesto y enfermedad renal crónica (que puede crear altos niveles de calcio en la sangre) son todas las causas posibles. Otros factores

Otros factores son los problemas de la glándula endocrina (donde su cuerpo desarrolla dificultades para procesar el calcio), la hipercalcemia (niveles elevados de calcio en la sangre), la actividad aumentada de la fosfatasa alcalina, la angiogénesis activa y los trastornos poco frecuentes como la sarcoidosis o la amiloidosis.