Cómo limpiar un casco de hockey
Cuando los cascos se ensucian o adquieren un olor desagradable, no se pueden colocar en la lavadora con el resto del equipo de hockey. Transmitir el casco de hockey después de su uso, en lugar de dejarlo en la bolsa de equipo, puede ayudar a mantener a raya a las bacterias. Para un trabajo más completo, necesitará jabón o champú, agua y un poco de cuidado adicional.
Rompa el champú
Una forma de limpiar un casco es llenar un lavabo o una bañera con Agua tibia y un poco de jabón líquido suave o champú que no se rasgue. Usar champú para bebés o algo similar lo ayuda a protegerse en caso de que quede algún residuo después de limpiarlo y gotee en sus ojos. Sumerge una esponja en el agua y úsala para frotar el casco, metiendo todas las grietas y las correas de plástico. Use una toalla para eliminar el exceso de agua y luego déjela en un área bien ventilada para que se seque. Para deshacerse de las bacterias que resisten un lavado normal, use regularmente un desinfectante en aerosol o una solución diluida de lejía y agua, no más del 10 por ciento de lejía en 90 por ciento de agua. Revise la etiqueta de cuidado antes de usar la lejía para asegurarse de que no sea dañina para el forro del casco.