Modificación del comportamiento para el niño de buena voluntad o desafiante

Criar a un niño de voluntad fuerte o desafiante puede ser uno de los trabajos más difíciles que enfrenta como padre. Puede tener problemas con el hogar, tener dificultades para manejar a su hijo en público e incluso puede estar lidiando con las interrupciones que su hijo está causando en la escuela. Varios programas de modificación de la conducta pueden ayudar a su familia, con cambios que se pueden hacer en el hogar y en la escuela.

Trastorno de oposición desafiante

Los niños extremadamente desafiantes pueden ser diagnosticados con trastorno de oposición desafiante o trastorno de conducta, dependiendo de Su edad y síntomas. Los niños con ODD muestran un patrón persistente de comportamiento poco cooperativo, desafiante y hostil que interrumpe las actividades diarias. Otros síntomas pueden incluir un bajo rendimiento académico, impulsividad y comportamiento antisocial. Cuando un niño muestra características de ODD o trastorno de conducta, primero verifique otros trastornos que puedan estar causando conductas desafiantes: esto incluye el trastorno por déficit de atención con hiperactividad, los trastornos del estado de ánimo o las discapacidades de aprendizaje. Si la conducta de oposición de un niño no se debe a otro trastorno, el primer paso para el tratamiento es proporcionar a los padres un programa de capacitación para padres. Si es posible, ambos padres visitan sesiones de terapia juntos para que el terapeuta y los padres puedan colaborar en un plan de comportamiento para ayudar al niño en todos los entornos donde se produce un comportamiento opuesto. Esto implica enseñar técnicas de crianza que se centren en las cualidades positivas de un niño en lugar de prestar atención a los aspectos negativos de los niños.

Parenting positivo

Muchos niños con ODD responden a los padres que proporcionan comentarios positivos para el niño y el modelo adecuado. comportamiento. Los padres siempre deben desarrollar el comportamiento positivo del niño y elogiarlo por su cooperación y buen comportamiento. Además, los padres deben establecer límites y consecuencias apropiados para la edad, y atenerse a esas reglas, sin importar cuánta rabieta el niño arroje. Si el niño continúa actuando fuera de línea, el padre debe permanecer firme con las consecuencias sin entrar en una batalla con el niño.

Un enfoque multidimensional

El comportamiento de oposición temprana puede ser un precursor de futuros comportamientos criminales La delincuencia y el abuso de sustancias en la adolescencia y la edad adulta, según un estudio de 1993 publicado en "Clinical Psychology Review" que los expertos en comportamiento infantil aún citan. El estudio metaanalítico, que se unió a 44 estudios similares, concluyó que el comportamiento antisocial de los niños causa interrupciones en las familias, las escuelas y las comunidades, y eventualmente involucra a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. Desde el principio, los padres deben abordar el trastorno con un enfoque multidimensional en el que reciben capacitación junto con otros elementos que abordan las necesidades del niño en la terapia y la escuela. En la terapia individual, el terapeuta y el niño abordan las habilidades de resolución de problemas del niño y trabajan en el manejo de la ira. Además, los padres y el maestro del niño deben diseñar un plan para garantizar que la escuela del niño establece límites y consecuencias, y recompensa la conducta positiva del niño.