El sarampión es una infección respiratoria altamente contagiosa causada por un virus. Se transmite por contacto con las gotitas respiratorias que produce una persona infectada al toser o estornudar. Estas gotas pueden caer en la boca o la nariz de las personas que se encuentran cerca, o pueden inhalarse hasta los pulmones. Las personas también pueden infectarse al tocar algo que ha sido contaminado con el virus y luego tocarse la cara o la boca.