¿Cuál es el propósito de las radiografías de huesos?

Las radiografías óseas son una técnica de diagnóstico por imágenes común que se utiliza para:

-Diagnosticar fracturas óseas, como huesos rotos, produciendo imágenes detalladas de los huesos y detectando irregularidades o roturas en la estructura ósea.

- Detectar infecciones óseas, como la osteomielitis, identificando cambios inusuales en la densidad y textura del hueso o la presencia de acumulaciones de líquido cerca del hueso afectado.

- Evaluar las afecciones de las articulaciones, como la osteoartritis o la artritis reumatoide, evaluando el espacio articular, la salud del cartílago y cualquier anomalía ósea que contribuya al dolor o la rigidez de las articulaciones.

- Búsqueda de tumores óseos, tanto benignos como malignos, identificando crecimiento o destrucción ósea anormal.

- Comprobar la alineación ósea y valorar deformidades, como escoliosis en la columna o piernas arqueadas.

- Evaluar la densidad ósea en casos de osteoporosis, una condición caracterizada por una disminución de la masa ósea, para determinar el grado de pérdida ósea y el riesgo de fractura.

- Monitorear la curación ósea después de fracturas, cirugías u otras intervenciones.

- Guiar procedimientos quirúrgicos que involucren los huesos, como reemplazos de articulaciones o reparación de fracturas.

- Identificar anomalías esqueléticas o variaciones en la estructura ósea que puedan indicar condiciones médicas subyacentes, como trastornos metabólicos o enfermedades genéticas.

- Detectar cuerpos extraños o dispositivos implantados dentro de los huesos.