¿Puede una quemadura de hidróxido de calcio dañar las articulaciones y los huesos?
Sí.
El daño por quemaduras de hidróxido de calcio puede afectar la piel, los músculos, las articulaciones, los tendones, los nervios, los vasos sanguíneos, los huesos y la médula ósea. La extensión del tejido dañado depende en gran medida de la concentración del producto químico aplicado, la temperatura (fría o caliente), la duración del contacto y la rapidez y minuciosidad de la limpieza de la herida después del contacto.