¿Qué indica una frecuencia cardíaca de 32 latidos por minuto en una mujer negra de 72 años?

Una frecuencia cardíaca de 32 latidos por minuto (lpm) en una mujer negra de 72 años puede indicar bradicardia, que es una afección en la que la frecuencia cardíaca es anormalmente lenta. La frecuencia cardíaca normal en reposo para los adultos suele estar entre 60 y 100 lpm, por lo que una frecuencia cardíaca de 32 lpm está significativamente por debajo de este rango. Si bien la bradicardia a veces puede ser un hallazgo normal en atletas bien entrenados o en personas que toman ciertos medicamentos, también puede ser un signo de afecciones médicas subyacentes.

En el contexto de una mujer negra de 72 años, es importante considerar varios factores que pueden contribuir a la bradicardia. Algunas posibles causas de bradicardia en esta población podrían incluir:

- Trastornos de la conducción cardíaca:son afecciones que afectan las vías eléctricas que controlan el ritmo cardíaco, lo que provoca una frecuencia cardíaca más lenta.

- Síndrome del seno enfermo:Se trata de una afección en la que el nódulo sinusal, que es responsable de iniciar los latidos del corazón, no funciona correctamente, provocando episodios de bradicardia.

- Hipotiroidismo:una glándula tiroides poco activa puede provocar un ritmo cardíaco más lento.

- Medicamentos:Ciertos medicamentos, como los betabloqueantes o los bloqueadores de los canales de calcio, pueden ralentizar la frecuencia cardíaca como efecto secundario común.

- Edad avanzada:a medida que las personas envejecen, el ritmo cardíaco puede volverse naturalmente más lento debido a cambios en el sistema eléctrico del corazón.

Sin embargo, es esencial tener en cuenta que esta información es de naturaleza general y no puede reemplazar una evaluación y diagnóstico en persona por parte de un profesional de la salud. Si usted o alguien que conoce experimenta una frecuencia cardíaca de 32 lpm, es fundamental buscar atención médica de inmediato, especialmente si se acompaña de síntomas como mareos, desmayos, dolor en el pecho o dificultad para respirar. Un proveedor de atención médica puede evaluar la salud general del individuo, realizar las pruebas necesarias y brindar el tratamiento o control adecuado según la causa subyacente de la bradicardia.