¿Es malo nadar con el resfriado y las glándulas inflamadas?
- Riesgo de infección: Una persona con un resfriado y glándulas inflamadas puede ser más susceptible a las infecciones transmitidas por el agua. Nadar en agua contaminada puede aumentar el riesgo de infección, ya que las bacterias o los virus pueden ingresar al cuerpo a través de la nariz o la boca.
- Propagación de la infección: Si una persona es contagiosa, nadar en aguas públicas puede aumentar el riesgo de transmitir la infección a otras personas. Al toser o estornudar mientras nada, los gérmenes pueden propagarse por el agua e infectar a otros nadadores.
- Mayor malestar: Nadar con congestión o glándulas inflamadas puede resultar incómodo, ya que la presión del agua puede provocar dolor y malestar en las zonas afectadas.
- Desempeño deteriorado: Un resfriado y una inflamación de las glándulas también pueden afectar el rendimiento en la natación, ya que pueden causar fatiga, dificultad para respirar y reducción de la capacidad pulmonar.