¿Cuáles son los efectos del entrenamiento aeróbico sobre la presión arterial?
Reducción de la presión arterial sistólica (PAS):
- El entrenamiento aeróbico reduce la presión arterial sistólica, el número más alto en una lectura de presión arterial. Se trata de actividades físicas rítmicas y sostenidas que mejoran la aptitud cardiovascular. Los estudios han demostrado que el ejercicio aeróbico constante puede reducir la presión arterial sistólica en un promedio de 5 a 10 mmHg.
Reducción de la presión arterial diastólica (PAD):
- Junto con la presión arterial sistólica, el entrenamiento aeróbico también puede reducir la presión arterial diastólica, el número más bajo en una lectura de presión arterial. El ejercicio aeróbico regular puede reducir la presión arterial diastólica en un promedio de 3 a 5 mmHg.
Función mejorada de los vasos sanguíneos:
- El entrenamiento aeróbico mejora la flexibilidad y la función de los vasos sanguíneos. Ayuda a mejorar la elasticidad de las paredes arteriales, reduciendo la rigidez y la resistencia al flujo sanguíneo. Como resultado, el corazón puede bombear sangre de manera más eficiente al reducir la presión en las paredes de los vasos.
Aumento de la producción de óxido nítrico:
- El ejercicio aeróbico favorece la liberación de óxido nítrico (NO), un vasodilatador que relaja y dilata los vasos sanguíneos, permitiendo un mejor flujo sanguíneo. El aumento de la producción de NO ayuda a mantener niveles saludables de presión arterial.
Rigidez arterial reducida:
- El entrenamiento aeróbico regular puede mejorar la distensibilidad arterial, haciéndolas menos rígidas. Esto permite un mejor flujo sanguíneo y una presión reducida en las arterias.
Función cardíaca mejorada:
- El entrenamiento aeróbico fortalece el músculo cardíaco, permitiéndole bombear sangre de forma más eficaz. Esto reduce la carga de trabajo del corazón y mejora su función general, contribuyendo a reducir la presión arterial.
Actividad parasimpática mejorada:
- El ejercicio aeróbico aumenta la actividad del sistema nervioso parasimpático, responsable de la respuesta de "descanso y digestión" del cuerpo. Esto puede ayudar a reducir la frecuencia cardíaca y la presión arterial.
Control de peso:
- El entrenamiento aeróbico ayuda a perder o mantener el peso, lo cual es crucial para el control de la presión arterial. El exceso de peso a menudo contribuye a la presión arterial alta.
Lípidos en sangre mejorados:
- El ejercicio aeróbico regular puede ayudar a mejorar los perfiles lipídicos al reducir el colesterol LDL (malo) y aumentar el colesterol HDL (bueno), afectando positivamente los niveles de presión arterial.
Reducción del estrés y la ansiedad:
- La actividad física, incluido el entrenamiento aeróbico, tiene efectos aliviadores del estrés. El estrés crónico puede contribuir a una presión arterial elevada. Al reducir el estrés, el ejercicio aeróbico promueve la relajación y reduce la presión arterial.
Es importante tener en cuenta que los efectos del entrenamiento aeróbico para reducir la presión arterial pueden variar según factores individuales como la edad, los niveles iniciales de presión arterial, la salud general y la consistencia del régimen de ejercicio. Se recomienda consultar a un profesional de la salud antes de iniciar un programa de entrenamiento aeróbico, especialmente si tiene afecciones cardiovasculares preexistentes.