¿Cuándo se propagó la viruela?

La viruela existe desde hace miles de años y alguna vez fue una de las enfermedades más devastadoras conocidas por la humanidad. Sus orígenes precisos son inciertos, pero la evidencia sugiere que la viruela puede haberse originado en el antiguo Egipto o la India.

Con el tiempo, la viruela se extendió por todo el mundo a través del comercio, los viajes y los conflictos militares. Las epidemias de viruela se han documentado en numerosos relatos históricos, incluso en la antigua China, Grecia y Roma. La enfermedad tuvo un impacto significativo en las poblaciones a lo largo de la historia, a menudo diezmando comunidades y dejando a los sobrevivientes con graves cicatrices y discapacidades.

Durante la colonización europea de América, la viruela se introdujo entre las poblaciones indígenas del hemisferio occidental, que no tenían inmunidad previa a la enfermedad. Las epidemias de viruela causaron una devastación catastrófica entre las comunidades indígenas, contribuyendo a la disminución de la población y a la perturbación social que experimentaron las tribus nativas americanas.

En el siglo XVIII, la viruela se convirtió en una gran preocupación para las naciones europeas debido a su alta tasa de mortalidad y los trastornos que causaba en las actividades militares y económicas. Se hicieron esfuerzos para desarrollar métodos de prevención y tratamiento, lo que dio como resultado el desarrollo de la inoculación y vacunación contra la viruela. La inoculación contra la viruela implicó exponer intencionalmente a las personas al virus de la viruela de manera controlada para desarrollar inmunidad, pero esta práctica conllevaba riesgos y podía provocar complicaciones.

La adopción generalizada de la vacuna contra la viruela, introducida por Edward Jenner a finales del siglo XVIII, revolucionó la lucha contra la enfermedad. La vacunación contra la viruela demostró ser una forma segura y eficaz de prevenir la viruela y condujo gradualmente a la disminución de la enfermedad en todo el mundo. En el siglo XX, la viruela se había erradicado en gran medida gracias a campañas de vacunación exitosas y a la cooperación internacional.

El último caso conocido de viruela natural se informó en Somalia en 1977. Sin embargo, las preocupaciones sobre el uso potencial de la viruela como arma biológica llevaron a nuevas investigaciones y al desarrollo de vacunas antivariólicas mejoradas y estrategias de respuesta. La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró oficialmente erradicada la viruela en 1980, lo que la convierte en la primera y hasta ahora única enfermedad humana que ha sido completamente erradicada mediante esfuerzos de vacunación.