¿El músculo esquelético almacena reservas de nutrientes?

El músculo esquelético almacena reservas de nutrientes, principalmente en forma de glucógeno. El glucógeno es un polisacárido que sirve como fuente de glucosa fácilmente disponible para obtener energía durante las contracciones musculares. Cuando el cuerpo necesita energía, el glucógeno se descompone en glucosa, que luego puede ser utilizada por las células musculares.

Además del glucógeno, el músculo esquelético también contiene pequeñas cantidades de triglicéridos almacenados. Estos triglicéridos se pueden descomponer en ácidos grasos, que también pueden utilizarse como fuente de energía durante el ejercicio prolongado o períodos de ayuno.

Por tanto, el músculo esquelético sí almacena reservas de nutrientes en forma de glucógeno y, en menor medida, triglicéridos. Estas reservas sirven como fuente de energía crucial para la actividad muscular y contribuyen al equilibrio energético general del cuerpo.