Cómo funcionan los tratamientos para la dermatitis atópica grave

La dermatitis atópica (DA), también conocida como eczema, es una afección inflamatoria crónica de la piel que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se caracteriza por piel enrojecida, con picazón e inflamación, y puede variar de leve a grave. Afortunadamente, existe una variedad de tratamientos disponibles para ayudar a controlar y aliviar los síntomas de la EA, según la gravedad de la afección.

Para la EA leve, los tratamientos tópicos suelen ser la primera línea de defensa. Estos incluyen humectantes para mantener la piel hidratada y prevenir una mayor irritación, corticosteroides tópicos para reducir la inflamación y la picazón, e inhibidores de la calcineurina para suprimir la respuesta inmune y reducir la inflamación.

En casos moderados a graves, pueden ser necesarios tratamientos sistémicos para controlar los síntomas de la EA. Estos incluyen corticosteroides orales, que son más potentes que los corticosteroides tópicos y pueden ayudar a reducir la inflamación y la picazón, y medicamentos inmunosupresores, que actúan suprimiendo el sistema inmunológico para reducir la inflamación y prevenir los brotes.

También se ha demostrado que los productos biológicos, una clase más nueva de tratamientos para la EA, son eficaces en el tratamiento de casos moderados a graves. Los productos biológicos son medicamentos inyectables que se dirigen a partes específicas del sistema inmunológico para reducir la inflamación y mejorar los síntomas.

En casos graves de EA, puede ser necesaria una terapia combinada, en la que se utilizan varios medicamentos juntos para lograr un mejor control de los síntomas. Además, los cambios en el estilo de vida, como evitar los desencadenantes conocidos, el manejo del estrés y el cuidado adecuado de la piel, también pueden desempeñar un papel importante en el control de la EA y la reducción de la gravedad de los brotes.

Es esencial trabajar en estrecha colaboración con un profesional de la salud, como un dermatólogo, para determinar el plan de tratamiento más adecuado para su caso individual de EA. Pueden brindarle orientación sobre qué opciones de tratamiento son seguras y efectivas para usted, y pueden monitorear su respuesta al tratamiento y ajustarla según sea necesario con el tiempo.