Cómo elegir un colchón para cuna

La seguridad es lo primero :Verifique la certificación de seguridad de la Comisión de Seguridad de Productos de Consumo (CPSC) o la Asociación de Fabricantes de Productos Juveniles (JPMA).

El tamaño importa: Elija un colchón que se ajuste a su cuna y que no tenga espacios para evitar atrapamientos accidentales.

Tipo de colchón:

a. Resorte interno:Económico con espirales, pero puede carecer de comodidad y soporte a medida que aumenta el peso del bebé.

b. Bobina:similar al resorte interno con bobinas adicionales para mayor comodidad y soporte.

do. Espuma:Generalmente hecha de poliuretano, ofrece buen confort y soporte.

d. Híbrido:combina espuma con otras capas de soporte para brindar comodidad y soporte, pero a menudo tiene un precio más alto.

Firmeza: Se recomienda un colchón de cuna firme para reducir el riesgo de SMSL (síndrome de muerte súbita del lactante).

Impermeable o Cubierta resistente a la humedad:Los accidentes ocurren, por lo que esta característica es esencial para una fácil limpieza.

Certificación Green Guard Gold: Opte por colchones certificados con bajas emisiones químicas para un ambiente de sueño más saludable.

Altura del colchón: Siga las pautas de la cuna para asegurarse de que las barandillas laterales estén al menos a 3 pulgadas por encima del colchón.

Consciente del presupuesto: Los precios de los colchones pueden variar significativamente, así que establezca un presupuesto antes de comenzar su búsqueda.

Reseñas: Lea reseñas para comprender las experiencias y opiniones de otros padres con el colchón.

Políticas de devolución: Comprueba si el colchón tiene una política de devolución razonable o un período de prueba en caso de que no cumpla con tus expectativas.

Recuerda que el colchón debe estar libre de telas sueltas, cuerdas o cualquier componente que pueda suponer un riesgo para la seguridad. El colchón de cuna que elija debe ser firme, ajustarse cómodamente y estar diseñado para que el bebé duerma con seguridad.