En general, se recomienda introducir alimentos sólidos, incluidos cereales, a un bebé cuando tiene entre 4 y 6 meses de edad, siempre que muestre signos de preparación para el desarrollo, como sentarse con apoyo, buen control de la cabeza y capacidad para sostener la cabeza. cabeza erguida. Consulte con el pediatra de su bebé para determinar el mejor momento para comenzar a presentarle cereal en el biberón para asegurarse de que se ajuste a sus necesidades y desarrollo individuales.