¿Cómo puede cambiar su forma de pensar y ser constantemente consciente de las limitaciones que la confidencialidad del paciente impone a la información de la discusión?
- Familiarizarse con la Ley de Responsabilidad y Portabilidad del Seguro Médico (HIPAA) y otras leyes y regulaciones relevantes.
- Comprender los tipos de información que se consideran información sanitaria protegida (PHI)
- Conocer las excepciones a la regla de confidencialidad del paciente.
2. Desarrollar una cultura de confidencialidad
- Fomentar una cultura de confidencialidad dentro de su organización sanitaria.
- Celebrar reuniones periódicas de personal para discutir las políticas y procedimientos de confidencialidad del paciente.
- Asegúrese de que todos los empleados firmen un acuerdo de confidencialidad.
3. Sea consciente de sus palabras y acciones
- Piense siempre detenidamente antes de discutir la información del paciente.
- Evite discutir información del paciente en lugares públicos.
- Solo comparta la información del paciente con aquellos que necesitan saberla.
4. Proteja la información del paciente electrónicamente
- Utilice contraseñas seguras para acceder a la información del paciente
- Cifrar la información del paciente al transmitirla electrónicamente
- Realizar copias de seguridad periódicas de la información del paciente
5. Responder rápidamente a las violaciones de confidencialidad
- Disponer de un plan para responder a violaciones de confidencialidad.
- Notificar a los pacientes afectados inmediatamente.
- Llevar a cabo una investigación para determinar cómo ocurrió la infracción.
6. Centrarse en los mejores intereses del paciente
- Recuerde siempre que el interés superior del paciente es primordial
- Sólo divulgar información del paciente cuando sea necesario para su cuidado o seguridad.
7. Busque orientación adicional
- Si tiene alguna pregunta sobre la confidencialidad del paciente, consulte con el departamento legal o el responsable de privacidad de su organización.
Si sigue estos pasos, podrá cambiar su forma de pensar y tomar conciencia constante de las limitaciones que impone la confidencialidad del paciente a la hora de discutir información. Esto le ayudará a proteger la privacidad del paciente y garantizar que la información del paciente se utilice únicamente para fines legítimos.