¿Qué es peor el estrés o el alcohol?
El alcohol, por otro lado, es un depresor que puede tener efectos en el organismo tanto a corto como a largo plazo. Los efectos a corto plazo del consumo de alcohol pueden incluir deterioro del juicio, disminución de la coordinación, dificultad para hablar y tiempos de reacción más lentos. El abuso de alcohol a largo plazo puede causar daño hepático, problemas cardíacos, cáncer y deterioro cognitivo. El alcohol también puede empeorar los efectos del estrés y exacerbar las condiciones de salud mental.
En general, es mejor controlar el estrés de forma saludable, como mediante ejercicio, técnicas de relajación y hablando con un terapeuta o consejero. Evitar el consumo excesivo de alcohol también es importante para mantener la salud y el bienestar general. Si tiene problemas de estrés o relacionados con el alcohol, se recomienda buscar ayuda profesional.