¿Qué es la atrofia geográfica?

La atrofia geográfica (GA) es una forma avanzada de degeneración macular seca asociada a la edad (DMAE) que se caracteriza por la muerte de las células del epitelio pigmentario de la retina (EPR) y de los fotorreceptores de la mácula, que es el área central de la retina responsable de las visión central.

Etapas de la DMAE:

1. DMAE temprana:se caracteriza por la presencia de pequeños depósitos amarillos de material graso llamados drusas en el EPR.

2. DMAE intermedia:a medida que las drusas crecen y se vuelven más numerosas, pueden provocar cambios en el EPR y el desarrollo de anomalías pigmentarias en la mácula.

3. AMD avanzada:esta etapa se caracteriza por dos formas principales:

- Atrofia Geográfica (DMAE Seca):Implica la degeneración y adelgazamiento progresivo del EPR y los fotorreceptores de la mácula, dando lugar a la formación de áreas geográficas de atrofia bien definidas.

- AMD neovascular o húmeda:esto ocurre cuando crecen nuevos vasos sanguíneos anormales debajo de la retina y pierden líquido o sangre, causando una rápida pérdida de la visión.

Generalmente, la GA afecta a ambos ojos, pero puede ser más grave en un ojo que en el otro. Progresa lentamente y puede provocar una pérdida significativa de la visión con el tiempo. La tasa de progresión puede variar de persona a persona.

Factores de riesgo:

- Edad:El riesgo de desarrollar GA aumenta con la edad, y es más común en personas mayores de 50 años.

- Predisposición genética:Se han identificado determinados genes que aumentan la susceptibilidad al GA.

- Tabaquismo:Fumar es uno de los factores de riesgo más importantes para desarrollar GA.

- Obesidad:El sobrepeso o la obesidad aumentan el riesgo de GA.

- Enfermedad cardiovascular:afecciones como la presión arterial alta y el colesterol alto están relacionados con un mayor riesgo de GA.

Síntomas:

- Visión central borrosa

- Reducción de la agudeza visual central.

- Dificultad para reconocer caras o detalles finos.

- Pérdida de percepción del color en las zonas afectadas.

Actualmente, no existe cura para la GA, pero algunos tratamientos pueden ayudar a retardar su progresión y preservar la visión, como:

- Inyecciones anti-VEGF:estos medicamentos se utilizan para inhibir el crecimiento de vasos sanguíneos anormales en la retina.

- Suplementos nutricionales:se ha demostrado que ciertas vitaminas y minerales retardan la progresión de la DMAE, incluidas la luteína, la zeaxantina, las vitaminas C y E y el zinc.

- Ayudas para la baja visión:los dispositivos de aumento y otras tecnologías de asistencia pueden ayudar a las personas con GA a aprovechar al máximo la visión que les queda.

Los exámenes oculares periódicos son cruciales para la detección temprana y el tratamiento de GA. Proteger los ojos de la radiación ultravioleta, no fumar, mantener una dieta saludable y controlar los factores de riesgo cardiovascular también pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar esta afección.