Buen plan nutricional
Un buen plan de nutrición debe ser dos cosas: suficiente y satisfactorio. Para que un plan de nutrición sea suficiente, debe satisfacer, pero no exceder, todas sus necesidades energéticas diarias, así como las necesidades de micronutrientes, fibra e hidratación de su cuerpo. Para que sea satisfactorio, tendrá que ser variado, agradable y fácil de seguir.
Conocer sus macros
Su cuerpo se basa en tres componentes dietéticos conocidos como macronutrientes. Estos son proteínas, carbohidratos y grasas. Su cuerpo necesita los tres para funcionar a un nivel óptimo, por lo que su plan de nutrición debe presentar cada macronutriente en proporciones equilibradas. El USDA recomienda proporciones diarias de ingesta de energía de 45 a 65 por ciento de los carbohidratos, 10 a 35 por ciento de proteínas y 20 a 35 por ciento de grasas. Puede experimentar con estas proporciones para ver qué se siente mejor para su cuerpo.
Variety Provides Micros
Comer una dieta balanceada (que incluye frutas, verduras, granos integrales, proteínas, lácteos y grasas saludables) proporciona Usted con micronutrientes como vitaminas y minerales. Comer una variedad de frutas y verduras de diferentes colores también te da antioxidantes y fibra. Varios tipos de granos, como el pan integral, el arroz integral, la avena y el salvado, también le brindan fibra, mientras que una selección de productos lácteos le proporciona bacterias saludables para su intestino.
Snacks nutritivos
Los alimentos y las comidas incluidos en su plan de nutrición deben proporcionarle suficiente energía y placer para que se sienta satisfecho y satisfecho, pero su plan también puede incluir opciones de bocadillos saludables. Estos bocadillos deben ser predominantemente alimentos integrales, como verduras, nueces, yogur natural y huevos. Las opciones más indulgentes incluyen chocolate negro, yogur congelado sin azúcar o queso blando; Estos te ayudarán a no tener que cargar con la sal, el azúcar, las calorías y los carbohidratos innecesarios. Mantenerte hidratado
Mantenerte hidratado es una parte vital de una buena nutrición. Su cuerpo depende del agua, especialmente para el metabolismo y la eliminación de desechos dañinos y toxinas de su sistema. Beba al menos ocho tazas de agua por día, especialmente si está muy activo, hace mucho ejercicio o vive en un clima cálido. El agua mejora su digestión, reduce el deseo de comer alimentos poco saludables de su cuerpo y lo ayuda a sentirse, verse y funcionar mejor.